Meditación Bíblica para 2 Crónicas 1
Hay una advertencia en 2 de Crónicas para que no permitamos que nada ni nadie en nuestras vidas desplace al Señor Jesús en nuestros corazones. Es demasiado fácil para nosotros buscar en las cosas buenas -familias, relaciones, carreras, pasatiempos o incluso candidatos políticos- la solución a nuestros problemas, de modo que atamos nuestros corazones a ellas y esperamos encontrar allí algún tipo de salvación. Pero si ni siquiera el propio rey Salomón era aquel gran Hijo de David que reinaría para siempre en el trono de Israel, ¿por qué hemos de creer que nuestros propios sustitutos de Jesús serán suficientes? En palabras del apóstol Juan: “Hijitos, guardaos de los ídolos” (1 Juan 5:21).