El contexto más amplio de Romanos 14 se refiere a si los cristianos podían comer carne sacrificada a los ídolos. Pablo explica que no había nada malo en comer ese tipo de comida en sí misma, pero si alguien cree que la actividad es pecaminosa, esa persona pecaría al comerla, ya que esa acción no procedería de la fe. Por lo tanto, Pablo también escribe que “es malo que el hombre haga tropezar a otros con lo que come” (Rom. 14:20). El profeta mayor hace pecar inicuamente a este hombre de Dios mintiéndole y animándole a actuar de maneras que violan específicamente la palabra que Dios le ha hablado.
¿Hay áreas en las que te comportas de manera contraria a tu conciencia? O, ¿hay áreas donde estás guiando a alguien más a violar su conciencia? En cualquiera de los dos casos, arrepiéntete: arrepiéntete de lo que no procede de la fe o arrepiéntete de hacer tropezar a otro.