¿En qué aspectos de tu vida estás maquinando en lugar de confiar en Dios? ¿En qué aspectos te tomas la justicia por tu mano en lugar de confiar en el Dios de David, y en el Hijo de David, que te amó tanto que murió por ti? Pensar que tú eres la única persona que velará por tu bienestar es una mentira del infierno. Arrepiéntete de tus maquinaciones y encomiéndate al Dios que juzga con justicia (1 Pe. 2:23).